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Si me ves que estoy
sin ganas en la cocina,
déjame llorar tranquila.
Si me asomo a la ventana, callada,
mírame, calla, no digas...
déjame llorar tranquila.
Si en plena noche me levanto,
sigilosa, llorosa, casi ida,
déjame llorar tranquila.
Si ves que mi baño se alarga,
mi mirada, no brilla...
déjame llorar tranquila.
Si mi aspecto cambia, amor
yo lo veo, no te aflijas, y
déjame llorar tranquila.
Si no contesto a tu llamada,
espera, mi alma suspira,
déjame llorar tranquila.
Si ves que en silencio,
mis lágrimas no gritan,
déjame llorar tranquila.
Si observas que, apenas puedo
tragar saliba, no insitas,
déjame llorar tranquila.
Si no te digo, te quiero, y
te amo mas que a mi misma,
déjame llorar tranquila.
Porque si sigo en esta lucha,
es por amor a ti, a la vida,
pero déjame llorar tranquila.
Ámame respetando mi dolor,
así como sabes, niña divina,
dejandome llorar tranquila.
Cédeme el derecho a soltar
mis miedos y agonías,
déjame llorar tranquila.
En tu acervado amor, ámame,
mímame, no me riñas... y
déjame llorar tranquila.
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